A Eugenio Montejo
giró en su infinito girar
tenue girar urgente
más allá del sol
devoramos nuestras huellas
reconocimos nuestras voces
me abracé a tus ojos
nos perdimos en un beso
l e n t a m e n t e desde entonces
tengo el alma
tejida
a
la
boca
1 comentario:
siempre te leo. aunque no me recuerdes tal vez, es algo fuera de este mundo lo que haces! Me gusta por razones sin causa ni motivo!
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